En esta parte, se explicará cuatro unidades tratadas en el curso y se analizará los temas aplicados al caso del Esquema Ponzi.
Unidad 2: El esquema de la ética para los negocios
Se utilizará el modelo de responsabilidad social Empresarial de Archie Carroll para evaluar el nivel de responsabilidad social que puede llegar a alcanzar las empresas que utilizan cualquiera de las variedades del Esquema Ponzi como medio para generar fortuna.
En primer lugar, se encuentra la responsabilidad económica, la cual tiene que ver con maximizar el retorno de los inversionistas. Este nivel de responsabilidad social no puede ser alcanzado por empresas que apliquen el esquema Ponzi pues, mas allá de incrementar las ganancias de sus inversionistas, en el corto plazo, a largo plazo les hacen perder el dinero invertido parcial o totalmente.
El segundo lugar, se encuentra la responsabilidad legal, que tiene que ver con las obligaciones requeridas por las leyes y códigos. Este nivel de responsabilidad social tampoco puede llegar a ser alcanzado por empresas que utilicen el esquema piramidal de Ponzi, pues en su mayoría no están inscritas en las entidades reguladores, por lo cual sus operaciones no son supervisadas por ninguna institución obteniendo libre albedrio de sus acciones. Asimismo, otras empresas se registran para realizar otra clase de operaciones comerciales y pese a que están al día en sus impuestos y cumplen con los certificados exigidos por el estado están realizando operaciones ocultas de tipo esquema Ponzi.
Recientemente, en casi todos los países, se ha fijado, entre las leyes y normas, la prohibición a la aplicación de cualquier tipo de esquema Ponzi como medio para obtener utilidades en un negocio. Sin embargo, para establecer estas normas legales, previamente, han existido muchos casos de estafa en dichos países por empresas que aprovecharon algún vacio legal.
En tercer lugar, se encuentra la responsabilidad ética, la cual obliga a las corporaciones a hacer lo correcto aunque no este mandado por la ley. Esta responsabilidad no estará ejercida puesto que si las empresas incumplen con las regulaciones y normas legales para realizar sus operaciones fraudulentas, menos aún cumplirán obligaciones que vayan más allá de lo legal.
Un ejemplo de todo lo anteriormente mencionado es la empresa DMG, la cual siguió haciendo lo incorrecto pese a que una ley regulaba el hecho de que ninguna empresa deba basarse en esquemas piramidales como medio de subsistencia. Lamentablemente, esto se da porque empresas como DMG tienen como único objetivo egoísta maximizar las ganancias del gestor de la estafa. Además, estas empresas no solo incumplen con la responsabilidad económica y legal, sino que también con la responsabilidad ética, pues las consecuencias de estas estafas dejan graves consecuencias tanto económicas como morales. Es decir, los promotores de estos ilícitos negocios, simplemente, quieren lograr su interés económico individual al no preocuparse por el bienestar de sus stakeholders. Por el contrario, no tienen reparo del daño que ocasionan y las graves consecuencias que se generan.
El cuarto lugar, se encuentra la responsabilidad filantrópica, que tiene que ver con las donaciones caritativas para con los trabajadores, sus familias, las comunidades locales y el país en el que se desenvuelve la empresa. Las empresas que siguen un esquema Ponzi jamás pueden llegar a tener responsabilidad filantrópica, a pesar de que en algún momento podrían realizar alguna “supuesta obra caritativa” con sus trabajadores, pues la principal actividad de la empresa está destinada a perjudicar el futuro de todos sus stakeholders con excepción del iniciador y algunos accionistas de la misma empresa. Entonces, podríamos decir que está responsabilidad es totalmente ignorada por los gestores del negocio ya que no tienen ningún interés en promover el bienestar de la comunidad; ya que, en realidad, observan que los fines del negocio van en contra de esta responsabilidad.
En conclusión, todas las empresas que aplican el esquema Ponzi en sus negocios nunca podrán llegar a tener ninguna clase de responsabilidad social. Esto se debe a que el objetivo principal de la empresa no está orientado hacia sus clientes, proveedores, ni siquiera a beneficiar a todos sus propios accionistas, sino que el fin de la empresa está destinado, únicamente, a maximizar las utilidades del gestor de la estafa, el cual es, generalmente, el accionista mayoritario.
Unidad 3: Teorías éticas normativas para los negocios
En esta parte, evaluaremos de qué manera las teorías éticas normativas nos ayudan a determinar lo incorrecto de aplicar el Esquema Ponzi en las empresas. Las teorías consecuencialistas más importantes son dos: el egoísmo y el utilitarismo.
La teoría ética del egoísmo sostiene que nuestra única guía moral que tenemos a disposición es la búsqueda de nuestros deseos y nuestros intereses. Este tipo de teoría ética aplicada al caso de estudio considera como una alternativa verdaderamente correcta el decidir aplicar el esquema Ponzi como un medio para que los empresarios generen ganancias. Puesto que, al aplicar el esquema Piramidal, los empresarios estarían cumpliendo con perseguir sus propios intereses. Sin embargo, esta teoría no toma en cuenta las consecuencias negativas que tiene para la sociedad la aplicación de este esquema. Por lo que en este caso esta teoría no es válida como una herramienta que ayude a decidir cuando una acción es moralmente correcta.
Por otro lado, se encuentra la teoría del utilitarismo, la cual parte del principio de la mayor felicidad para el mayor número de personas, pues considera que una acción es moralmente correcta si trae como consecuencia mayor bienestar posible para la gran mayoría. Esta teoría, respecto al caso de estudio, nos indica que el no aplicar el esquema conlleva en el mayor bienestar para el mayor número de personas implicadas con las consecuencias de aplicar este esquema. Esto es porque, el no llevar a cabo un esquema piramidal, evita que se vean afectados tanto los accionistas que invirtieron, como los inversionistas, el pueblo y hasta el país en donde se llevo a cabo la estafa. Incluso, el gestor de la estafa sale beneficiado de no aplicar el esquema pues, así tiene su conciencia limpia y eso es algo que aparte de generarle placer lo salva de tener futuros problemas con la justicia. Por tanto, esta teoría resulta totalmente válida para ayudar identificar como una alternativa incorrecta el decidir aplicar el esquema Ponzi.
Finalmente y caso a parte, se encuentran las teorías anticonsecuencialistas, cuyas dos teorías más importantes son la teoría de los deberes y la teoría de los derechos y la justicia. La teoría de los deberes postula que la moralidad son unos ciertos principios eternos, abstractos e inamovibles denominados “imperativo categórico” que constituye el marco teórico que debe aplicarse a toda decisión moral.
El imperativo categórico consta de 3 máximas:
La primera máxima indica que se debe actuar, únicamente, de acuerdo con una máxima tal que al mismo tiempo puedas desear que se convierta en una ley universal. Es decir, una acción puede ser congruente, solamente, si cualquiera puede seguir el mismo principio subyacente.
Al utilizar esta primera máxima para decidir si aplicar el esquema Ponzi es correcto o no, una persona con pocos valores y/o con poca moral podría considerar que utilizar un esquema piramidal es algo que lo podría hacer todo el mundo, pero, definitivamente, no puede ser considerada como una ley general o universal. Entocnes, esta máxima, aplicada al caso, es una base efectiva para considerar como incorrecto el decidir aplicar esquemas piramidales.
La segunda máxima, postula que se debe de actuar de tal modo que trates siempre a la humanidad, sea en tu propia persona o en la persona de otros, como un fin y no como un medio.
Esta segunda máxima, al ser evaluada por personas con pocos valores y que planean aplicar esquemas piramidales (en donde es necesario utilizar a los otros como un fin para alcanzar sus objetivos personales), no puede ser cumplida. Entonces, al cumplirse está máxima, se ayuda a que los empresarios asuman que la aplicación de este tipo de esquemas es una alternativa incorrecta.
La tercera máxima postula que se debe actuar solamente de modo que las máximas que guían tu voluntad puedan ser ellas mismas fuentes de leyes universales.
Esta tercera máxima dista aún más de poder ser alcanzada por empresarios estafadores. Pues, la decisión de realizar actos corruptos y egoístas por parte de los empresarios estafadores jamás podrán ser consideradas ellas mismas como fuentes universales.
En conclusión, de acuerdo a lo que indican las tres máximas, los empresarios deben identificar como incorrecto y perjudicial para los demás; es decir, decidir aplicar un esquema piramidal en su empresa.
Por último, se encuentra la teoría de los derechos y la justicia. Con respecto a la teoría de los derechos señala que debemos actuar en todo momento respetando los derechos naturales.Las empresas que aplican el esquema Ponzi, no llegan a cumplir con lo que postula esta teoría que es el respeto de los derechos naturales, pues no respetan los derechos de sus stakeholders, sino que dañan y perjudican psicológica y económicamente. Pues, una vez descubierta la estafa muchos de ellos se deprimen y hasta se enferman al darse cuenta que han perdido una gran proporción o la totalidad de su dinero invertido en una empresa corrupta. Esta teoría, en este caso, sí es útil como una teoría que ayude a desechar la decisión de los empresarios de aplicar el esquema Ponzi, pues la considera una alternativa moralmente incorrecta.
Por otro lado, con respecto a la teoría de la justicia, indica que debemos actuar de tal manera que nuestras decisiones resulten en consecuencias justas para todos. Es decir, para el caso de estudio, los empresarios deben utilizar esta teoría como medio para medir que decisiones verdaderamente correctas deben tomar.
El decidir aplicar un esquema piramidal en las empresas conlleva a resultados totalmente injustos. Los primeros inversores, probablemente, sean los menos afectados si es que retiran su dinero a tiempo. Por otro lado, los últimos inversores salen mucho más perjudicados ya que son los que pierden todo su dinero sin haber recibido antes ninguna ganancia por su inversión cuando no ingresan mas inversionistas y, por ende, la estafa es descubierta.
En conclusión, esta teoría si resulta útil para identificar como es una alternativa incorrecta el aplicar el esquema Ponzi en un negocio.
Unidad 4: Teorías descriptivas de la ética para los negocios.
En esta parte examinaremos de qué manera los factores individuales que intervienen en la toma de decisiones éticas influyeron en la decisión de los empresarios corruptos de aplicar un esquema piramidal en sus empresas. Así vemos cómo el desarrollo moral es uno de los factores que se encuentra muy débil en una persona corrupta, lo que hace que el hecho de estafar a los demás resulte algo aceptable y hasta correcto en ellos.
Asimismo, la imaginación moral es otro factor que tiene que ver con la capacidad de las personas de ver más allá de sus futuros actos y considerar también las consecuencias. La poca imaginación moral de los empresarios corruptos hace que ellos no vean más alla de obtener cuantiosas ganancias a corto plazo. Y es que, en realidad, ellos no se preocupan de las consecuencias de sus decisiones a largo plazo, como el tener que afrontar demandas futuras ante la justicia.
Por otro lado, la integridad personal es uno de los factores que tienen que ver con actuar, únicamente, en base a valores y principios. Ante ello, podemos decir que los empresarios que aplican el Esquema Ponzi en sus negocios no cuentan con integridad personal, ya que no actúan en base a ningún valor o principio moralmente aceptable.
La edad es otro de los factores que influyen sobre la decisión de los empresarios de aplicar o no un esquema piramidal en sus empresas. La edad influye sobre esta decisión porque mientras más adulto sea el empresario que tome esta decisión, más sólida serán las bases con las que cuenta para decidir si puede actuar correcta o incorrectamente.
La cultura nacional es otro factor que tiene que ver con las creencias éticas de cada individuo, modeladas por la cultura a la que pertenezca. En el caso de estudio, la cultura a la que pertenezcan los empresarios que aplican el Esquema Ponzi influye mucho sobre el tipo de creencias que tenga. Por ejemplo, si pertenece a una cultura como la China, sus decisiones estarán más orientadas hacia como ellas influyen en los demás. Sin embargo, si pertenece a una cultura como la estadounidense, sus decisiones pueden estar guiadas a como esta influye sobre su propia persona (búsqueda de beneficio personal).
El nivel de educación tiene que ver con la formación tanto ética como profesional que tenga cada individuo. El nivel de educación que posean los empresarios corruptos muchas veces se refiere únicamente a una educación profesional. Estos empresarios no tienen una educación ética que los guíe en sus decisiones, por lo que, cuando estan al frente de decidir si aplicar un esquema como el Ponzi, no saben si priorizar únicamente sus intereses o tener en cuenta el de los demás.
Unidad 5: Herramientas gerenciales de la Ética para los negocios
Las herramientas gerenciales proporcionan una base sólida en las empresas que ayudan a definir como deben de comportarse sus stakeholders cuando se encuentran frente a un problema ético. Para el caso analizado, la herramienta de formación y entrenamiento en ética hubiera brindado el entrenamiento ético necesario para que aquellos empresarios que piensan en hacerse ricos rápidamente consideren otro medio para lograr sus objetivos (el invertir en negocios rentables y correctos) en vez de tratar de sostener todo un sistema que los ayude obtener grandes riquezas por medio de estafas.
Otra herramienta útil para el caso analizado hubieran sido los programas de consulta, diálogo y asociación con los grupos de interés de la empresa. Esta herramienta hubiera ayudado a que las empresas que estaban pasando por problemas difíciles de afrontar y que implicaban la subsistencia de la empresa, reciban el apoyo necesario de otras instituciones que los ayuden a superar el problema. En el caso analizado, algunas empresas, luego de pasar por ciertos problemas que estaban afectando gravemente el valor de las acciones de la empresa, decidieron cambiar su rumbo de negocio hacia un negocio basado en un esquema piramidal, pues este esquema les brindaba a las empresas la posibilidad de seguir obteniendo ganancias y de subsistir sin importar el modo en que lo logren.
Por lo tanto, en estos casos en particular, estas herramientas resultan útiles para que las empresas en problemas no se dirijan a solucionar sus problemas por medios bajos sino que busquen ayuda de otras instituciones.
Redactado por Jessica Serrano
Unidad 2: El esquema de la ética para los negocios
Se utilizará el modelo de responsabilidad social Empresarial de Archie Carroll para evaluar el nivel de responsabilidad social que puede llegar a alcanzar las empresas que utilizan cualquiera de las variedades del Esquema Ponzi como medio para generar fortuna.
En primer lugar, se encuentra la responsabilidad económica, la cual tiene que ver con maximizar el retorno de los inversionistas. Este nivel de responsabilidad social no puede ser alcanzado por empresas que apliquen el esquema Ponzi pues, mas allá de incrementar las ganancias de sus inversionistas, en el corto plazo, a largo plazo les hacen perder el dinero invertido parcial o totalmente.
El segundo lugar, se encuentra la responsabilidad legal, que tiene que ver con las obligaciones requeridas por las leyes y códigos. Este nivel de responsabilidad social tampoco puede llegar a ser alcanzado por empresas que utilicen el esquema piramidal de Ponzi, pues en su mayoría no están inscritas en las entidades reguladores, por lo cual sus operaciones no son supervisadas por ninguna institución obteniendo libre albedrio de sus acciones. Asimismo, otras empresas se registran para realizar otra clase de operaciones comerciales y pese a que están al día en sus impuestos y cumplen con los certificados exigidos por el estado están realizando operaciones ocultas de tipo esquema Ponzi.
Recientemente, en casi todos los países, se ha fijado, entre las leyes y normas, la prohibición a la aplicación de cualquier tipo de esquema Ponzi como medio para obtener utilidades en un negocio. Sin embargo, para establecer estas normas legales, previamente, han existido muchos casos de estafa en dichos países por empresas que aprovecharon algún vacio legal.
En tercer lugar, se encuentra la responsabilidad ética, la cual obliga a las corporaciones a hacer lo correcto aunque no este mandado por la ley. Esta responsabilidad no estará ejercida puesto que si las empresas incumplen con las regulaciones y normas legales para realizar sus operaciones fraudulentas, menos aún cumplirán obligaciones que vayan más allá de lo legal.
Un ejemplo de todo lo anteriormente mencionado es la empresa DMG, la cual siguió haciendo lo incorrecto pese a que una ley regulaba el hecho de que ninguna empresa deba basarse en esquemas piramidales como medio de subsistencia. Lamentablemente, esto se da porque empresas como DMG tienen como único objetivo egoísta maximizar las ganancias del gestor de la estafa. Además, estas empresas no solo incumplen con la responsabilidad económica y legal, sino que también con la responsabilidad ética, pues las consecuencias de estas estafas dejan graves consecuencias tanto económicas como morales. Es decir, los promotores de estos ilícitos negocios, simplemente, quieren lograr su interés económico individual al no preocuparse por el bienestar de sus stakeholders. Por el contrario, no tienen reparo del daño que ocasionan y las graves consecuencias que se generan.
El cuarto lugar, se encuentra la responsabilidad filantrópica, que tiene que ver con las donaciones caritativas para con los trabajadores, sus familias, las comunidades locales y el país en el que se desenvuelve la empresa. Las empresas que siguen un esquema Ponzi jamás pueden llegar a tener responsabilidad filantrópica, a pesar de que en algún momento podrían realizar alguna “supuesta obra caritativa” con sus trabajadores, pues la principal actividad de la empresa está destinada a perjudicar el futuro de todos sus stakeholders con excepción del iniciador y algunos accionistas de la misma empresa. Entonces, podríamos decir que está responsabilidad es totalmente ignorada por los gestores del negocio ya que no tienen ningún interés en promover el bienestar de la comunidad; ya que, en realidad, observan que los fines del negocio van en contra de esta responsabilidad.
En conclusión, todas las empresas que aplican el esquema Ponzi en sus negocios nunca podrán llegar a tener ninguna clase de responsabilidad social. Esto se debe a que el objetivo principal de la empresa no está orientado hacia sus clientes, proveedores, ni siquiera a beneficiar a todos sus propios accionistas, sino que el fin de la empresa está destinado, únicamente, a maximizar las utilidades del gestor de la estafa, el cual es, generalmente, el accionista mayoritario.
Unidad 3: Teorías éticas normativas para los negocios
En esta parte, evaluaremos de qué manera las teorías éticas normativas nos ayudan a determinar lo incorrecto de aplicar el Esquema Ponzi en las empresas. Las teorías consecuencialistas más importantes son dos: el egoísmo y el utilitarismo.
La teoría ética del egoísmo sostiene que nuestra única guía moral que tenemos a disposición es la búsqueda de nuestros deseos y nuestros intereses. Este tipo de teoría ética aplicada al caso de estudio considera como una alternativa verdaderamente correcta el decidir aplicar el esquema Ponzi como un medio para que los empresarios generen ganancias. Puesto que, al aplicar el esquema Piramidal, los empresarios estarían cumpliendo con perseguir sus propios intereses. Sin embargo, esta teoría no toma en cuenta las consecuencias negativas que tiene para la sociedad la aplicación de este esquema. Por lo que en este caso esta teoría no es válida como una herramienta que ayude a decidir cuando una acción es moralmente correcta.
Por otro lado, se encuentra la teoría del utilitarismo, la cual parte del principio de la mayor felicidad para el mayor número de personas, pues considera que una acción es moralmente correcta si trae como consecuencia mayor bienestar posible para la gran mayoría. Esta teoría, respecto al caso de estudio, nos indica que el no aplicar el esquema conlleva en el mayor bienestar para el mayor número de personas implicadas con las consecuencias de aplicar este esquema. Esto es porque, el no llevar a cabo un esquema piramidal, evita que se vean afectados tanto los accionistas que invirtieron, como los inversionistas, el pueblo y hasta el país en donde se llevo a cabo la estafa. Incluso, el gestor de la estafa sale beneficiado de no aplicar el esquema pues, así tiene su conciencia limpia y eso es algo que aparte de generarle placer lo salva de tener futuros problemas con la justicia. Por tanto, esta teoría resulta totalmente válida para ayudar identificar como una alternativa incorrecta el decidir aplicar el esquema Ponzi.
Finalmente y caso a parte, se encuentran las teorías anticonsecuencialistas, cuyas dos teorías más importantes son la teoría de los deberes y la teoría de los derechos y la justicia. La teoría de los deberes postula que la moralidad son unos ciertos principios eternos, abstractos e inamovibles denominados “imperativo categórico” que constituye el marco teórico que debe aplicarse a toda decisión moral.
El imperativo categórico consta de 3 máximas:
La primera máxima indica que se debe actuar, únicamente, de acuerdo con una máxima tal que al mismo tiempo puedas desear que se convierta en una ley universal. Es decir, una acción puede ser congruente, solamente, si cualquiera puede seguir el mismo principio subyacente.
Al utilizar esta primera máxima para decidir si aplicar el esquema Ponzi es correcto o no, una persona con pocos valores y/o con poca moral podría considerar que utilizar un esquema piramidal es algo que lo podría hacer todo el mundo, pero, definitivamente, no puede ser considerada como una ley general o universal. Entocnes, esta máxima, aplicada al caso, es una base efectiva para considerar como incorrecto el decidir aplicar esquemas piramidales.
La segunda máxima, postula que se debe de actuar de tal modo que trates siempre a la humanidad, sea en tu propia persona o en la persona de otros, como un fin y no como un medio.
Esta segunda máxima, al ser evaluada por personas con pocos valores y que planean aplicar esquemas piramidales (en donde es necesario utilizar a los otros como un fin para alcanzar sus objetivos personales), no puede ser cumplida. Entonces, al cumplirse está máxima, se ayuda a que los empresarios asuman que la aplicación de este tipo de esquemas es una alternativa incorrecta.
La tercera máxima postula que se debe actuar solamente de modo que las máximas que guían tu voluntad puedan ser ellas mismas fuentes de leyes universales.
Esta tercera máxima dista aún más de poder ser alcanzada por empresarios estafadores. Pues, la decisión de realizar actos corruptos y egoístas por parte de los empresarios estafadores jamás podrán ser consideradas ellas mismas como fuentes universales.
En conclusión, de acuerdo a lo que indican las tres máximas, los empresarios deben identificar como incorrecto y perjudicial para los demás; es decir, decidir aplicar un esquema piramidal en su empresa.
Por último, se encuentra la teoría de los derechos y la justicia. Con respecto a la teoría de los derechos señala que debemos actuar en todo momento respetando los derechos naturales.Las empresas que aplican el esquema Ponzi, no llegan a cumplir con lo que postula esta teoría que es el respeto de los derechos naturales, pues no respetan los derechos de sus stakeholders, sino que dañan y perjudican psicológica y económicamente. Pues, una vez descubierta la estafa muchos de ellos se deprimen y hasta se enferman al darse cuenta que han perdido una gran proporción o la totalidad de su dinero invertido en una empresa corrupta. Esta teoría, en este caso, sí es útil como una teoría que ayude a desechar la decisión de los empresarios de aplicar el esquema Ponzi, pues la considera una alternativa moralmente incorrecta.
Por otro lado, con respecto a la teoría de la justicia, indica que debemos actuar de tal manera que nuestras decisiones resulten en consecuencias justas para todos. Es decir, para el caso de estudio, los empresarios deben utilizar esta teoría como medio para medir que decisiones verdaderamente correctas deben tomar.
El decidir aplicar un esquema piramidal en las empresas conlleva a resultados totalmente injustos. Los primeros inversores, probablemente, sean los menos afectados si es que retiran su dinero a tiempo. Por otro lado, los últimos inversores salen mucho más perjudicados ya que son los que pierden todo su dinero sin haber recibido antes ninguna ganancia por su inversión cuando no ingresan mas inversionistas y, por ende, la estafa es descubierta.
En conclusión, esta teoría si resulta útil para identificar como es una alternativa incorrecta el aplicar el esquema Ponzi en un negocio.
Unidad 4: Teorías descriptivas de la ética para los negocios.
En esta parte examinaremos de qué manera los factores individuales que intervienen en la toma de decisiones éticas influyeron en la decisión de los empresarios corruptos de aplicar un esquema piramidal en sus empresas. Así vemos cómo el desarrollo moral es uno de los factores que se encuentra muy débil en una persona corrupta, lo que hace que el hecho de estafar a los demás resulte algo aceptable y hasta correcto en ellos.
Asimismo, la imaginación moral es otro factor que tiene que ver con la capacidad de las personas de ver más allá de sus futuros actos y considerar también las consecuencias. La poca imaginación moral de los empresarios corruptos hace que ellos no vean más alla de obtener cuantiosas ganancias a corto plazo. Y es que, en realidad, ellos no se preocupan de las consecuencias de sus decisiones a largo plazo, como el tener que afrontar demandas futuras ante la justicia.
Por otro lado, la integridad personal es uno de los factores que tienen que ver con actuar, únicamente, en base a valores y principios. Ante ello, podemos decir que los empresarios que aplican el Esquema Ponzi en sus negocios no cuentan con integridad personal, ya que no actúan en base a ningún valor o principio moralmente aceptable.
La edad es otro de los factores que influyen sobre la decisión de los empresarios de aplicar o no un esquema piramidal en sus empresas. La edad influye sobre esta decisión porque mientras más adulto sea el empresario que tome esta decisión, más sólida serán las bases con las que cuenta para decidir si puede actuar correcta o incorrectamente.
La cultura nacional es otro factor que tiene que ver con las creencias éticas de cada individuo, modeladas por la cultura a la que pertenezca. En el caso de estudio, la cultura a la que pertenezcan los empresarios que aplican el Esquema Ponzi influye mucho sobre el tipo de creencias que tenga. Por ejemplo, si pertenece a una cultura como la China, sus decisiones estarán más orientadas hacia como ellas influyen en los demás. Sin embargo, si pertenece a una cultura como la estadounidense, sus decisiones pueden estar guiadas a como esta influye sobre su propia persona (búsqueda de beneficio personal).
El nivel de educación tiene que ver con la formación tanto ética como profesional que tenga cada individuo. El nivel de educación que posean los empresarios corruptos muchas veces se refiere únicamente a una educación profesional. Estos empresarios no tienen una educación ética que los guíe en sus decisiones, por lo que, cuando estan al frente de decidir si aplicar un esquema como el Ponzi, no saben si priorizar únicamente sus intereses o tener en cuenta el de los demás.
Unidad 5: Herramientas gerenciales de la Ética para los negocios
Las herramientas gerenciales proporcionan una base sólida en las empresas que ayudan a definir como deben de comportarse sus stakeholders cuando se encuentran frente a un problema ético. Para el caso analizado, la herramienta de formación y entrenamiento en ética hubiera brindado el entrenamiento ético necesario para que aquellos empresarios que piensan en hacerse ricos rápidamente consideren otro medio para lograr sus objetivos (el invertir en negocios rentables y correctos) en vez de tratar de sostener todo un sistema que los ayude obtener grandes riquezas por medio de estafas.
Otra herramienta útil para el caso analizado hubieran sido los programas de consulta, diálogo y asociación con los grupos de interés de la empresa. Esta herramienta hubiera ayudado a que las empresas que estaban pasando por problemas difíciles de afrontar y que implicaban la subsistencia de la empresa, reciban el apoyo necesario de otras instituciones que los ayuden a superar el problema. En el caso analizado, algunas empresas, luego de pasar por ciertos problemas que estaban afectando gravemente el valor de las acciones de la empresa, decidieron cambiar su rumbo de negocio hacia un negocio basado en un esquema piramidal, pues este esquema les brindaba a las empresas la posibilidad de seguir obteniendo ganancias y de subsistir sin importar el modo en que lo logren.
Por lo tanto, en estos casos en particular, estas herramientas resultan útiles para que las empresas en problemas no se dirijan a solucionar sus problemas por medios bajos sino que busquen ayuda de otras instituciones.
Redactado por Jessica Serrano
No hay comentarios.:
Publicar un comentario